Los gastos y prioridades del gobierno de cara a la COP 20
- A través del Ministerio del Ambiente se gastarán US$ 77.6 millones del tesoro público en la organización de la COP 20 que tendrá a Lima como sede. A esto se agrega 20.7 millones de otros aportes extranjeros. Sin embargo, entre las prioridades del Gobierno se encuentran el Posicionamiento Político y la Atracción de Inversiones. ¿Es este el verdadero objetivo de una cumbre sobre el cambio climático?
Por José Carlos Díaz Zanelli
Servindi, 13 de noviembre, 2014.- A pocas semanas de que Lima sea el escenario de la XX Conferencia sobre Cambio Climático de las Naciones Unidas (COP 20), es escaso el esfuerzo que se ve desde el Gobierno central para promocionar lo que vendría a ser el acontecimiento más importante del año a nivel mundial en materia de medio ambiente.
El sector encargado de la organización de este evento -que según un estimado de la Cámara de Comercio de Lima (CCL) podría contar hasta con 20 mil participantes- es el Ministerio del Ambiente (Minam), encabezado por Manuel Pulgar Vidal.
¿Cuánto está gastando el Minam para realizar este evento? De acuerdo al propio ministerio, toda la organización implica un gasto de US$ 77.6 millones del tesoro público. A esto se le deben sumar unos US$ 20.7 millones provenientes de otras entidades, es decir, sector privado u organizaciones civiles.
¿En qué se está gastando el dinero? En setiembre del 2013, el Minam emitió una resolución en la que explicó la creación de cuatro grupos de trabajo para la organización de la COP 20. Estos son el grupo de Imagen, Frente Público, Negociación y el de Logística y Organización, este último, como se desprende, es el que ejecutará un mayor gasto. Y es que para cualquier país es verdaderamente oneroso alojar y trasladar a presidentes, ministros y empresarios de 194 países.
Para la secretaria ejecutiva de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH), Rocío Silva Satisteban, el gasto que ejecutaría el Gobierno peruano no estaría justificado tomando en cuenta que el cambio climático no es una de sus prioridades. Y no solo eso, sino que precisa que los temas que de verdad representan una problemática nacional no serán recogidos por la agenda de la COP 20.
“Desde la perspectiva de los derechos ambientales en el Perú no tenemos la menor expectativa. Lo que se va a ver en la COP va más a la agenda mundial y que también es problemático. Lo que está sucediendo en el Perú que tiene que ver con impactos en la salud y la vida de las personas”, argumenta la secretaria ejecutiva de la CNDDHH.
Prioridades de la COP 20
A esto hay que sumarle un detalle. Uno de los objetivo de la COP 20 será concluir el borrador del acuerdo de cambio climático en materia de reducción de gases de efecto invernadero. Este borrador tendría que ser aprobado en el año 2015 en la COP 21 a organizarse en París. Es decir, que el evento que tendrá como sede a Lima no contará un carácter resolutivo.
Es más, será la cumbre parisina la que defina un documento que sustituirá al famoso Protocolo de Kyoto de 1997. Este hecho fue reconocido a fines de octubre por el propio asesor de cambio climático del Gobierno Peruano, Jorge Gastelumendi, quien dijo que “Lima tiene que ser un paso esencial para poder llegar a un acuerdo en París”.
Esto, definitivamente, ha generado suspicacias respecto al gasto que está realizando el país.
“Si se dice que los borradores de la COP Lima serán resueltos en la COP París, yo me preguntaría si el Gobierno Francés invertirá tal cantidad de dinero en la COP”, cuestiona Silva Santisteban.
Entonces queda la pregunta. ¿Por qué tanto interés en realizar una inversión tan fuerte en una cumbre que no elaborará un documento oficial sobre compromiso ambiental a nivel global y tampoco verá problemáticas de carácter interno? Para ello uno se puede remitir a la misma resolución del Minam que proclamó de interés público a la COP 20. En este documento el sector plasmó los cinco objetivos que tiene el Gobierno central de cara a este evento y los colocó en el siguiente orden prioritario en el acápite 1.2:
Posicionamiento político.
Atracción de inversiones.
Promoción de inversiones verdes.
Ingresos económicos para el país.
Cambio climático e inclusión social.
“Pensar que la COP tiene como primer lugar el posicionamiento del Perú en el mundo, es no tener el objetivo claro de lo que significa una conferencia de tal índole. Por eso es que se está invirtiendo tal cantidad de dinero”, sentencia Rocío Silva.
El caso mexicano
Cabe recordar la polémica generada en relación a la última cumbre de esta naturaleza que se realizó en un país latinoamericano. En 2010, la ciudad mexicana de Cancún fue la anfitriona de este evento que al Gobierno de México le costó US$ 77.5 millones –similar al presupuesto de Perú–.
La controversia en dicho país se generó cuando se dio a conocer que más de la mitad de presupuesto se destinó a la tercerización de servicios en la instalación de las salas de conferencia y la seguridad para el Estado Mayor Presidencial.
Al término de la COP 16, la prensa mexicana hizo una estimación de US$ 15.6 millones de excedente retirado del erario público para la organización del evento. Este aumento, además, respondía a viáticos de los funcionarios y espectáculos de entretenimiento. Al final, eso terminó afectando el tesoro público de las municipalidades, lo que en su momento generó una controversia a nivel político en México. ¿Ocurrirá lo mismo en Perú?
Datos claves:
US$ 77.6 millones es lo que usará del presupuesto público el Gobierno en la organización de la COP 20.
US$ 20.7 millones es lo que aportarán la ONU, la Unión Europea, Canadá, Estados Unidos y otras entidades privadas en la organización de la COP 20.
92 por ciento de los peruanos no conocen ni han escuchado de la COP 20 según encuesta de Datum del mes de noviembre.
52 por cient0 de la población peruana considera que el Gobierno se esfuerza poco o no hace lo suficiente en el cuidado del medio ambiente.
Escrito por
Agencia de noticias especializada en temas indígenas y ambientales, con sede en Lima, Perú.